Antes de viajar a EEUU, como fatal preludio de su final, Fernando Martín sufrió un accidente con un Mercedes 450 SLC que quedó siniestro y del que salió ileso. Sin embargo, cuando se estrelló con su Lancia Thema en la madrileña M-30, la historia de uno de los mejores jugadores del baloncesto español llegó a su fin. En la cancha todavía le esperaban sus compañeros que iban a jugar ante el CAI Zaragoza. Cuando la noticia llegó al Palacio de los Deportes, el partido se suspendió. El baloncesto acababa de perder a Fernando Martín.
El extraordinario jugador dejó viuda a su mujer, la modelo alemana Petra Sonneborn, y huérfano a su hijo, Jan Fernando Martín. Su hermano Antonio también se quedó solo en el tándem familiar que formaban en el equipo blanco. El club lo recuerda con especial cariño. En su día retiró la camiseta y ahora le dedica un lugar especial en el museo de la entidad. El tres de diciembre de 1989 permanecerá en la eternidad de la memoria del baloncesto. Con sólo 27 años, Fernando Martín, se despidió de todos los aficionados, quienes aún le recuerdan, como ídolo de los ochenta.
Atrás quedaron los mejores años del Real Madrid y de la selección española. En 1988 ganó su último título con el conjunto blanco, la Recopa de Europa. Fue el premio logrado tras su vuelta de la aventura americana. Los Portland Trail Blazers le dieron la oportunidad de jugar en la mejor liga del mundo. En 1987, Fernando Martín se convirtió en el primer español y segundo europeo en jugar en la NBA tras pasar por el 'draft'. Con el conjunto norteamericano sólo jugó 24 partidos. Sufrió varias lesiones y no le fue fácil hacerse un hueco en el equipo, por lo que su bagaje se redujo a 22 puntos y 28 rebotes. "La adaptación ha sido muy dura pero estoy plenamente satisfecho porque, en realidad, he venido aquí para aprender y cada rebote que cojo es un triunfo" comentó en su día.
La NBA ya había tanteado a Fernando. Los Nets también se habían fijado en él y le invitaron un año antes a su campus de verano. El equipo de Nueva Jersey le convirtió en el primer español en ser nominado para el 'draft'.
Los dorados '80
En el verano de 1981 fichó por el Real Madrid, con quien estrenó sus vitrinas. Nada más llegar ganó la Intercontinental, el Mundial de clubes en el 82, las ligas de las temporadas 82/83 y 83/84 y los dobletes de Liga y Copa en las temporadas 84/85 y 85/86. Además, se coronó como subcampeón de Europa en 1985 y campeón de la Recopa de Europa tres años después.
El Madrid lo fichó del Estudiantes por 10 millones de pesetas. Con el equipo estudiantil debutó en Liga en la temporada 79/80 y quedó subcampeón de Primera División en la 80/81. Su buena actuación le hizo internacional. Con sólo 19 años debutó con la selección absoluta con una victoria ante Francia por 106-109. La selección también le reportó notables éxitos hasta ahora no igualados.
El punto álgido del baloncesto español fue en 1984. España se proclamó subcampeona olímpica en Los Ángeles. Los Romay, Corbalán, Epi, Jiménez, Llorente, Arcega, Margall, Solozábal, De La Cruz, Iturriaga, Beirán y, por supuesto, Fernando Martín lograron la cumbre del baloncesto español. En 1983 ya avisaron de su potencial con otro éxito, la plata en el Europeo de Nantes. Fernando cerró su ciclo en el conjunto nacional con 72 partidos y 998 puntos anotados.